MANTO DE COLA
El manto de cola de la Virgen recoge la historia de la hermandad. Está expuesto en la Capilla del Encuentro de la parroquia de María Auxiliadora, es de terciopelo alemán azul marino. Fue bordado a mano con hilo de seda, pedrería, oro y tisú por las Damas de Mantilla de la hermandad y esposas de costaleros, bajo la dirección de D. José Carrión en 1996, y alberga escudos de presidentes de la hermandad, fundadores, salesianos, bordadores/as y familias que contribuyeron en la su confección.
PALIO
Como ya hemos comentado anteriormente, el hecho de que la Virgen no dispusiese de un Trono nuevo confeccionado a su medida, es decir, construido pensando en la imagen que debiera llevar, más el hecho de que se quisiese realizar uno de mayor calidad, provocó que a finales de los 90 se gestase la idea de adquirir un Paso de Palio. Su realización se distribuiría en tres fases.
Primera Fase:
Confección del nuevo Manto de Cola diseñado por D. José Carrión. Comenzó a confeccionarse el 16 de septiembre 1996 por miembros de la Hermandad en los locales salesianos, bajo la dirección del señor Carrión. Al mismo tiempo, se iniciaron los trabajos de bordado del nuevo vestuario “de calle” de la Virgen y del nuevo estandarte del Paso.
Esta primera fase se completaría con la adquisición de una candelería adecuada, labrada en plata repujada y comprada a la Orfebrería Sevillana. El 11 de junio de 1996 se firma el contrato con dicha empresa, estrenándose en parte en la Semana Santa de 1997.
Debido a las dimensiones del nuevo Manto, en marzo de 1997 se decide construir en la “Capilla del Encuentro” de la Parroquia de María Auxiliadora, una vitrina que cubriría gran parte de la pared, para guardarlo y exponerlo a la feligresía todo el año. El 14 de ese mismo mes, el Manto, el Vestido de procesionar y el nuevo ajuar de la Virgen es bendecido durante la celebración del Acto Institucional de la Hermandad.
Segunda Fase:
Construcción del nuevo Trono en plata repujada.
El 14 de junio de 1999, se firma el contrato con la Orfebrería Sevillana para la construcción de la canastilla, los doce varales de Palio, dos candelabros de cola y catorce jarras. También se aprovecha y se encargan 100 hachones para los hermanos de fila, once varas de mando labradas, una nueva cruceta para el estandarte de la Cena y dos faroles guías.
Entregado el Paso en marzo de 2000, se presentó al Concurso de Tronos de nueva creación convocado en el mes de abril, obteniendo el primer premio.
El 20 de abril de 2000, Jueves Santo, saldría por primera vez en procesión. Las medidas serían de 3,60×2,70 metros, siendo llevado por 6 varales delanteros y los mismos traseros.
Como anécdota diremos que ese año se decidió, no sin polémica, que el Paso saliese en Procesión únicamente con los varales de palio –de 2.70 metros de altura cada uno-, pero sin el techo, sin el llamado “cielo”, porque todavía no estaba terminado.
Tercera Fase:
Techo de Palio.
El 1 de julio del 2000 se suscribe el contrato con las Hermanas Clarisas del Convento de Santa Clara, en Alcaudete, para la confección del “techo de Palio”, con unas medidas de 3,50×1,90mts. Sobre un fondo de terciopelo azul marino, las hermanas bordarían en el “cielo”, distintas imágenes alegóricas a la familia salesiana con fino hilo de oro y pedrería, entre figuras florales y formas geométricas. Asimismo, las hermanas elaborarían un nuevo vestido de procesionar para la Virgen, utilizando telas nobles e hilo de oro.