El primer año que la Virgen salió sola, sin la imagen del Cristo de la Caída, será en 1994, y hasta el año 2000 estuvo procesionando con un paso adquirido a la Cofradía de la Soledad de Santa María y otro a la Hermandad del Gran Poder.
En 2001 la empresa Orfebrería Sevillana, construyó un nuevo paso de palio para la Virgen en plata repujada, toda vez que el techo -también llamado “cielo”- las bambalinas y demás bordados del palio, serían confeccionados por las Hermanas Clarisas del Convento de Santa Clara. Ese año también estrenaría un nuevo vestido elaborado por la misma comunidad de religiosas, que sería donado a los padrinos del paso, y que éstos donarían a su vez a la hermandad.